Se agrava la crisis social en Santa Cruz
Desde hoy habrá paros y protestas RIO GALLEGOS.– Pese a que el Indec informó que Río Gallegos tiene el índice de desempleo más bajo del país (1,2%), las medidas de fuerza anunciadas para hoy por parte de la mesa sindical provincial pintan una realidad que difiere de las estadísticas.
El gremio docente continuará con las protestas iniciadas el 5 de este mes y hará un paro de 72 horas. También habrá una huelga del Poder Judicial, de 24 horas, y de los afiliados a la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE). Y todos los esfuerzos estarán puestos en la movilización convocada para mañana a las 16 en la avenida Roca, principal arteria de esta ciudad.
La fuerte presencia de la Gendarmería Nacional en las calles y la falta de señales oficiales para destrabar el conflicto muestran una incertidumbre sobre el rumbo político de la provincia del presidente Néstor Kirchner. Y, una vez más, la llave de la solución al asunto parece estar en sus manos.
A diferencia de las marchas anteriores, que reunieron a más de 3000 personas, la movilización se hará esta vez ante la mirada atenta de la Gendarmería, apostada en las manzanas lindantes a la casa de Kirchner.
“Nos parece un contrasentido que hayan militarizado la ciudad. Siempre priorizamos el diálogo y hemos demostrado que sabemos marchar pacíficamente”, dijo Ezequiel Pérez, del gremio que agrupa a los empleados legislativos.
Desde el viernes pasado, una dotación de 40 hombres de la Gendarmería permanece en las inmediaciones de la casa del Presidente y, según pudo saber LA NACION, está aquí por pedido expreso del jefe del Estado.
El fin de semana, el ministro de Gobierno, Daniel Varizat, se reunió con un grupo de gremios que no integran la mesa sindical y no acompañan las medidas de protesta, y les aseguró que a la brevedad habrá anuncios sobre aumentos salariales. "Estamos muy cerca del anuncio, pero no podemos adelantar nada. Nosotros siempre tuvimos diálogo. No sólo pedimos aumento salarial, sino muchas otras reivindicaciones", dijo ayer a LA NACION José Castro, secretario general de la Unión Personal Civil de la Nación (UPCN), que agrupa a los empleados públicos.
Desde el gobierno provincial nadie se expresó públicamente sobre la situación reinante, pese a las reiteradas consultas. LA NACION pudo saber que Varizat hizo llegar el mensaje del Presidente a los gremios cercanos.
Según pudo reconstruir LA NACION, desde la Casa Rosada se estaría previendo convocar al Consejo del Salario Mínimo, que se podría reunir a principios de la semana próxima, y allí habría una propuesta de aumento salarial de alrededor del 10 por ciento.
Según la misma fuente, sólo después de que se concrete esa reunión a nivel nacional la provincia podría hacer un anuncio de mejoras salariales que rondaría entre el 15 y el 20%, pero los incrementos no se pagarían antes del 29 del actual.
Directivas
Hasta que eso ocurra, el gobierno no abriría el diálogo con los gremios en protesta y sólo mantendría vínculos con los sectores más cercanos. Esas habrían sido las directivas del Presidente, que estuvo en esta provincia durante el fin de semana.
Por su parte, desde el radicalismo, el diputado provincial Omar Hallar afirmó que la movilización sindical "demuestra que la gente está necesitando un aumento".
"Cuando se debatió el presupuesto en la Cámara, le planteamos al oficialismo la necesidad de un aumento salarial y sólo pusieron una suma estimativa a la suba de la inflación", dijo el legislador de la UCR. Y agregó: "Hay recursos para dar aumento, pero el gobierno elige o prioriza la obra pública, obras que están sobrefacturadas, en desmedro de dar aumentos salariales".
La marcha convocada para mañana por los docentes, judiciales, legislativos, municipales de Río Gallegos, ATE y SAT, integrantes de la mesa sindical, se repetirá en todas las localidades de la provincia, según estimaron los organizadores. El gremio docente, en tanto, espera contar otra vez con una fuerte adhesión al paro.
La presencia de la Gendarmería contrasta con el paisaje cotidiano y por ahora sólo encontró rechazo en quienes llevan adelante la protesta. La seguridad se reforzó luego de que el viernes a la madrugada estallara una bomba molotov arrojada en el interior de un auto estacionado frente a la sede gremial.
Hasta ahora, y pese a los repetidos actos de violencia contra la sede sindical, el gobierno provincial no dispuso ni ofreció custodia policial allí.
"No vamos a responder con actitudes violentas. Pusieron a la Gendarmería en la calle cuando los docentes estaban de asamblea", recordó ayer Pedro Muñoz, dirigente docente.
El sábado a la noche, 30 hombres -entre gendarmes y policías- montaron una guardia a sólo una cuadra de la escuela Ladvocat, donde se desarrollaba la asamblea.
Mientras tanto, Alfonso Lobo, secretario general del gremio judicial, denunció que en una reunión mantenida con los vocales del Tribunal Superior de Justicia recibieron "sugerencias de no unirse a las medidas de fuerza". "Un vocal nos dijo que si nos adheríamos iban a votar a favor de los descuentos por el paro", dijo Lobo.
Los delegados de ATE responden al PJ histórico, pero no son kirchneristas. La conducción gremial apoya al ex kirchnerista y candidato a gobernador Eduardo Arnold. En tanto, los legislativos y los municipales de Río Gallegos están alineados con la CGT local.
